El culto regresó ayer al santuario de Muxía, el templo de la coruñesa Costa da Morte que amaneció entre llamas en la Navidad de 2013. Aunque hace meses que concluyó el grueso de la rehabilitación, no fue hasta este domingo cuando los fieles volvieron a venerar a la Virgen da Barca de la mano de su párroco, Manuel Liñeiro. La cita, con coral incluida, congregó...
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