Pese al rechazo de algunos partidos, y los recelos de la Autoridad Catalana de Protección de Datos, los ciudadanos y los profesionales médicos, el Gobierno catalán prosigue con su proyecto de venta de datos –anónimos– de pacientes catalanes que podrían acabar siendo gestionados por empresas privadas.
El llamado proyecto Visc+ fue aprobado inicialmente en noviembre...
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