A los «drillers» (perforadores) no les emociona la visita de extraños. Pero la agria polémica generada por los sondeos petrolíferos que el Rowan Renaissance está realizando en Canarias ha forzado una situación muy poco habitual en un barco así.
Recibir periodistas desde Lanzarote es todo un reto para los casi 200 miembros –40 de ellos canarios– del buque exploratorio...
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