Las borrascas siempre han castigado el norte de España. Y siempre que las olas gigantes han batido su litoral, la gente se ha acercado para ver a la Naturaleza desatada. Pero ahora parece que se aproximan mucho más. Convertirse en fotógrafo de fenómenos extremos o hacerse un «selfie» con una ola gigante a la espalda se están convirtiendo en una moda; en ocasiones,...
Suscribete para leer la noticia completa: