El llamado «Woodstock católico» concluyó ayer como empezó, en un clima de entusiasmo y fervor religioso, aunque algunos políticos iberoamericanos no quisieron perderse esta posibilidad de salpicarse en el baño de masas del Papa Francisco.
Los presidentes del país anfitrión, Brasil, Dilma Rousseff, Argentina, Cristina Fernández, y Bolivia, Evo Morales, asistieron...
Suscribete para leer la noticia completa:

