Las elecciones, hoy, no se ganan. Se pierden. Y si alguien intenta ganarlas, las pierde por pasarse de listo
TODO el mundo, dentro y fuera de su partido, parece empeñado en que Rajoy haga una confesión en toda la regla, es decir, como se hacían antes: con examen de conciencia, dolor por los pecados cometidos, confesión de los mismos, propósito de enmienda y cumplimiento...
Suscribete para leer la noticia completa:

