La inspiradora histórica del espectáculo populista, que hoy ejercen nuestros telepolíticos, fue la señora de un dictador argentino
LAS sociedades del siglo XXI no tienen ciudadanos. Tienen telespectadores. No se puede aspirar a vivir de un sueldo político sin alzar acta de eso. Ni planificar una carrera hacia el poder por ruta que no pase a través de los televisores,...
Suscribete para leer la noticia completa:

