Está el ministro de Justicia a la busca y captura de un sinónimo de la palabra más denostada de nuestra vida pública: imputado. Aunque la urgencia mediática y la cólera popular hayan terminado por equiparar imputado a procesado –e incluso a condenado– el Gobierno ha pedido a la RAE que reflexione sobre una condición jurídica que solo apunta a que alguien es sospechoso...
Suscribete para leer la noticia completa:

