El primate le escamoteó al fotógrafo la autoría, le birló la gloria y, lo que es peor, le relativizó la pericia
LA célebre foto de la tortilla, aquel retrato de merienda campestre de la pandilla sevillana que pocos años más tarde gobernaría España en la primera etapa del felipismo, está firmada por Pablo Juliá pero no la hizo él. El fotógrafo aparece, de hecho,...
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