EN aquella España antigua, triste, que con monotonía miraba la lluvia tras los cristales, la infancia era el único tesoro que brillaba entre tanta oscuridad. Pan con chocolate de merienda. Pantalones cortos y maletas de cuero para el cole. Niñas jugando al elástico con trenzas tan grandes como para que el príncipe de sus sueños infantiles pudiera agarrarse a...
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