Con las mejores perspectivas, las grandes variables económicas sobrevuelan el espacio de una crisis que, a ras de suelo, no parece tener final para la sociedad, incapaz de sacar partido a una recuperación que no termina de aterrizar. Sin embargo, algo se mueve en los hogares españoles. Paralizado y retraído como consecuencia de la recesión, el consumo privado...
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