En estos años, donde parece que andamos a tientas por el desolador panorama económico-político actual, no debemos dejarnos llevar por la desesperanza y, en cambio, apoyarnos en todo lo que hasta ahora hemos conseguido. España no debe confundir progreso, innovación y mejora con una aniquilación de la tradición y el patrimonio nacional. De la misma manera que no...
Suscribete para leer la noticia completa:

