El siguiente lunes al de Pascua, el llamado «Lunes de Aguas», tiene en Salamanca un sabor característico, el del hornazo que ayer consumieron los miles de ciudadanos que se acercaron a las orillas del Tormes para celebrar una jornada campera cuyos orígenes, no demasiado castos, se remontan al siglo XVI. El tradicional festejo se basa en una leyenda que tiene...
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