El orbe cristiano celebró ayer la Resurrección de Cristo, fecha capital del calendario litúrgico y base esencial y razón de ser de la fe de los católicos. En la plaza de San Pedro del Vaticano, el Papa Francisco aprovechó la misa pascual para pedir por los cristianos que aún son perseguidos dos milenios después de la muerte del primero de ellos, Jesús. La despiadada...
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