Carlos Piñel y Antonio Gamoneda son viejos conocidos, y cuando el pintor trasladó su idea del nuevo proyecto al poeta, le pareció espléndido. Gamoneda tenía muy claro que sus poemas no tendrían una relación referencial o temática con los cuadros ni que la pintura de Piñel fuera una ilustración a sus poemas. Se trataba de un diálogo en el que «no se sabe muy bien...
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