La democracia es tan aburrida como un reloj de cuco, ese invento del que se mofaba Graham Greene como la única gran aportación suiza en el guión de «El tercer hombre», la película de Orson Welles. El alcalde Zoido llegó al sillón de la casa consistorial sosteniendo que pretendía hacer que Sevilla funcionara como un reloj, aunque no especificó si éste sería de...
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