A la altura de la isla de Borneo, el piloto del vuelo QZ8501 de AirAsia pidió permiso para subir hasta los 38.000 pies y poder esquivar una zona de turbulencias, pero nunca más volvió a saberse de su avión. A bordo viajaban 162 personas, que habían partido de la ciudad indonesia de Surabaya con destino a Singapur, en su mayoría para pasar la Nochevieja. La falta...
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