Los periódicos son productos con fecha de caducidad muy corta. Recién hechos cada día, con las noticias de las últimas veinticuatro horas. Pero hay acontecimientos que merecen parar incluso el ritmo frenético de una redacción; detener el trasiego de titulares para hacer un producto perdurable, de esos que no solo no quedan obsoletos al día siguiente, sino que...
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