Cuando al hijo del alcalde de Río le dijeron que su padre iba a recibir al alcalde de Barcelona, la criatura hizo lo normal: pedirle que le dejara asistir al acto para poder lucir la camiseta de la selección española. Y cuando Xavier Trias se encontró frente a frente con el niño, hizo lo anormal: ponerle encima la camiseta del Barça. La lógica del chaval (Barcelona/España/campeona...
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