En su retiro del convento vaticano de Mater Eclessiae, además de la oración y la música de Mozart, Bach y Beethoven, Benedicto XVI mantiene otra de sus aficiones, la del paseo vespertino. Incluso se ha acrecentado. Siempre que el tiempo se lo permite, emprende por los jardines que rodean su residencia un recorrido en el que suele detenerse unos minutos a charlar...
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