Atrás queda aquella «crisis del pepino» que, sin fundamento y con epicentro alemán, puso bajo sospecha a toda nuestra oferta alimentaria. Los productos españoles gozan de buena salud y, tres años después de aquel brote pasajero de psicosis y mentiras, ocupan el sitio que merecen en la principal muestra internacional del sector. Los Príncipes de Asturias acudieron...
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