Metro ha relevado de sus funciones al responsable de su servicio de Seguridad tras el envío de un correo homófobo por parte de un trabajador y ha abierto expedientes disciplinarios a otros dos empleados.
La empresa considera que el responsable debería haber supervisado el envío del documento, del que la empresa se desvincula totalmente y que instaba a incrementar...
Suscribete para leer la noticia completa:
