Las víctimas de los grafitis por la fuerza siempre son los mismos: los ciudadanos y empresarios que ven deslucidas sus fachadas con pintadas de toda índole. En la capital, el municipio más castigado por los grafitis (100 hectáreas llena de pintadas), tres son las formas con las que los ciudadanos se enfrentan a este vandalismo: restando dinero a su bolsillo,...
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