El Mediterráneo volvió a cobrarse ayer una veintena de vidas entre aquellos que tratan de cruzarlo de forma precaria. Al menos 22 personas, incluidos cuatro niños, se ahogaron cuando trataban de llegar a la isla griega de Kos en una barca de madera, que volcó a mitad de la travesía debido al fuerte oleaje. Los guardacostas turcos rescataron a 211 supervivientes,...
Suscribete para leer la noticia completa: