Veinte minutos después de haber comenzado la proyección de la película «Trainwreck» el jueves por la noche en un cine de la localidad de Lafayette (estado de Luisiana), uno de los cien espectadores se levantó en medio de la oscuridad y comenzó a disparar a su alrededor de modo indiscriminado. John Russel Houser, de cincuenta y nueve años, un vagabundo con antecedentes...
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