Situada a 215 kilómetros de Damasco, y a la misma distancia entre el Mediterráneo y el Éufrates, el enclave de Palmira sació la sed de su tierra gracias a fuentes subterráneas, convirtiéndose en un oasis y en punto de encuentro de comerciantes cuyas caravanas transitaban desde el Mediterráneo a la ciudad de Emesa (la actual Homs).
Gracias al comercio –estaba situada...
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