«Llegamos con el primer tren de prisioneros a la estación de Auschwitz. Éramos 728 jóvenes, la mayoría estudiantes. Nos bajaron de los vagones y nos llevaron ante el edificio principal de la estación. Tenían una lista con nuestros nombres. El oficial nazi Karl Fritzsch se dirigió a nosotros para dedicarnos unas palabras que me han acompañado toda la vida. ‘No...
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