Los holandeses se enteraron la semana pasada de las peripecias de una madre llamada Monique, que ha logrado rescatar del infierno a su hija, una chica normal a la que «le gustaba salir y tocar el piano» y que, sin embargo, con sus 18 años recién cumplidos había decidido convertirse al islam, cambiar su nombre por el de Aisha y partir en busca de Omar Yilmaz,...
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