La salud, política y personal, de la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, le está dando demasiados quebraderos de cabeza. Aunque, en realidad, lo que le está sucediendo es que entre unas cosas y otras, se ha quedado sin palabras. O sea, sin voz.
Un par de semanas después del procesamiento de su vicepresidente, Amado Boudou, por apropiarse indebidamente...
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