Casa Santa María fue concebida como morada de reyes y reinas. A comienzos del siglo XX, Jorge Torlades O’Neill, un aristócrata de origen irlandés afincado en Portugal, mandó levantar esta regia residencia sobre los acantilados de la costa de Cascais a su imagen y semejanza: pretenciosa e inaccesible. Gracias a su fortuna, fruto del boyante negocio tabacalero,...
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