Han pasado ocho años desde que Françoise Bettencourt-Meyers, hija de Liliane Bettencourt, la mujer más rica de Francia, ordenó al mayordomo de su madre que grabara todas las conversaciones que esta mantenía por teléfono. De este modo, salían a la luz veinte horas de grabaciones secretas que destaparon un escándalo político-financiero que llegó hasta el Palacio...
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