El presidente de Galicia es una de las pocas Ítacas que le quedan al PP. Por eso en la tarde del domingo hizo uso de reflejos y olfato político y remodeló por sorpresa su Gobierno, creciendo en Consejerías sociales y deshaciéndose de nombres incómodos. Parecía estar esperando que Mariano Rajoy convocara elecciones para sentar las bases de su futuro, y quién sabe...
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