Gracias a su alianza con el PSE para repartirse la tarta del poder después del 24-M, y con la inestimable colaboración de Bildu, que prometió no obstaculizar a los «jeltzales», el PNV completó ayer el rodillo impuesto en las seis grandes instituciones vascas: además de los Ayuntamientos de las tres capitales, controla las tres Diputaciones forales. Solo quedaba...
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