Las intervenciones telefónicas de la operación Clotilde de la Guardia Civil, de enero de 2013, revelan hasta qué punto los altos cargos de la Banca Privada de Andorra (BPA) sabían que la entidad estaba siendo utilizada para blanquear enormes sumas de dinero por elementos del crimen organizado ruso y magnates venezolanos que movían fondos millonarios supuestamente...
Suscribete para leer la noticia completa:

