La habitualmente tranquila vida de Gibraltar se alteró ayer como pocas veces con el descubrimiento de cuatro cadáveres –un británico de 37 años; su pareja de 31 (cubana, pero con residencia en España) y su hija de cuatro años fruto de una relación anterior; y un bebé de ambos que contaba con seis meses– en un apartamento de alquiler. Las víctimas murieron por...
Suscribete para leer la noticia completa: