Tres años de legislatura, tres renuncias clave, el descontento de los colectivos que trabajan en la Administración de Justicia y ahora también la rebelión de buena parte de la Sala Segunda del Supremo, la encargada de juzgar a los aforados. El Gobierno no ha tenido mucha suerte en sus relaciones con altos cargos de la Justicia.
Apenas seis meses después de que...
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