Tres años después de que un joven tunecino en paro se quemara a lo bonzo para denunciar su desesperación y desencadenara una oleada de protestas, mandatarios de todo el mundo se dieron ayer cita en Túnez para celebrar su nueva Constitución. En representación de España asistió el Príncipe de Asturias, quien transmitió al pueblo tunecino el apoyo de nuestro país...
Suscribete para leer la noticia completa:

