Elena es una de las pasajeras que espera en el andén la llegada del primer tren que repetirá el trayecto del Alvia siniestrado. Porta un gran macuto colgado a la espalda y hace cola, paciente, para atravesar el último control de seguridad antes de entrar el tren, que lleva ya más de veinte minutos de retraso.
Sobre si ha pensado en cancelar su billete tras la...
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