La banca española ha recuperado su salud tras un profundo proceso de recapitalización y reestructuración. Nadie en la comunidad financiera internacional pone ya en entredicho su solvencia. Ahora bien, las entidades de nuestro país siguen sufriendo en Bolsa. La debilidad de países emergentes como China y Brasil, la crisis griega, la constante presión regulatoria...
Suscribete para leer la noticia completa: