El éxito de Amancio Ortega es el paradigma de esas fortunas silenciosas que se amasan y se cuecen al fuego lento de la constancia y el trabajo duro, ajenas al estrépito mediático y a los deslumbrantes fuegos artificiales de los flashes. El triunfo inapelable de una persona corriente con un talento extraordinario para observar, aprender y aplicar en sus negocios...