«Puede haber alguien limpio, pero el 99 por ciento de los atletas rusos, incluso los mejores, acaban cediendo». Las declaraciones de la lanzadora rusa Evgenia Pecherina no fueron una simple confesión por resentimiento tras haber sido cazada dos veces dopándose y sancionada por diez años. Son una prueba más de que la máxima potencia del atletismo (líder en el...
Suscribete para leer la noticia completa:

