Hágase la luz. No la generada por las llamas de acetileno que producen el carburo y el agua al mezclarse en los carbureros, llamas que silbaban en las salas subterráneas emitiendo el único ruido en este reino de silencio. Ahora la tecnología led proporciona lámparas más potentes, limpias y con una autonomía de 72 horas, muy superior a las 8 horas de los viejos...
Suscribete para leer la noticia completa: