Ni el propio Real Madrid pensaba que estaba tan mal. Dos cabezazos estelares del mejor futbolista del mundo sacaron al Real Madrid de una tragedia casi griega y al final se pidió la hora después del terrorífico 3-4. Ancelotti fue silbado cuando su nombre se anunció junto a las alineaciones, antes del partido, y todo el equipo soportó una pitada general de la...
Suscribete para leer la noticia completa: