Costó treinta millones de euros en julio del año pasado. Se ganó el puesto como titular en ocho partidos que conquistaron al Bernabéu. Y el fracaso en el derbi de octubre de 2013 condenó a Francisco Alarcón al banquillo. No defendía. Continuó jugando casi todos los partidos, pero Ancelotti recurría a su genialidad en los segundos tiempos. Aprendió a trabajar,...
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