Recién ascendido, con el presupuesto más bajo de la Bundesliga, lidera la tabla antes de visitar hoy al Bayern
Hay equipos a los que es complicado no cogerles simpatía. Por su juego, por sus méritos o porque se cuelan entre los mejores cuando nadie cuenta con ellos. El «Superdépor» de los 90, el Alavés que perdió la final de la UEFA o el Ludogorest búlgaro que...
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