Un año más Sebastian Vettel se escapa. No es el contenido que anunciaba el Mundial de Fórmula 1 después del feliz negocio de Fernando Alonso en el gran premio de China. No era lo que preveían los pronosticadores después de catalogar el rendimiento de los coches, de oponer su rentabilidad en los espejos. El Ferrari había dado el salto de calidad frente a la hegemonía...
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