En el año 1992 una jovencísima Lucía Lacarra ensayaba bajo el castigador sol de verano en el anfiteatro de la ciudad romana de Itálica junto a sus compañeros del Ballet de Víctor Ullate. Lacarra tenía 17 años y hacía dos que había ingresado en la escuela de su maestro. Esta noche la bailarina, convertida en una de las grandes estrellas de la danza de este momento,...
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