Silencio, expectación, tranquilidad, sorpresa... Una mezcla de sentimientos reinaban en la tarde de ayer en la Catedral de Valladolid. Esa misma mañana se había conocido que uno de los sacerdotes de la Diócesis ha sido citado a declarar en calidad de imputado a raíz de haber realizado hasta trece exorcismos a una niña burgalesa. En el juzgado se investiga si...
Suscribete para leer la noticia completa: