El leonés Ángel Villalba, eterno y siempre fracasado aspirante a presidente autonómico, dijo allá, por 2003, en campaña electoral, que Castilla y León «ha dejado de ser el granero de votos del PP» y aspiraba a que, «por fin», su región «esté de moda: en un mes con el PSOE en la presidencia, y dentro de un año con otro leonés, José Luis Rodríguez Zapatero, en...
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